Es de noche y navego vagabunda
sobre el mar inquieto de mis sombras.
Buscándote en penumbras van mis manos
que hastiadas de hilar alas en mis dedos
ensamblan en papel, una paloma.
La libero en vuelo hacia las nubes del cielo.
Y entre cirros preparo un tálamo y te espero.
Pero esperar es desvelo que a mi pasión amilana...
Mi deseo de amarte no espera al mañana.