martes, 25 de octubre de 2016

ROCÍO DE LA AURORA

Te busco en el rocío de la aurora
anoche no pasaste por mis sueños
imagino que eres leña resecada
humeando en las brasas de otro fuego.

Confundido al indagar en mi ventana
tropezaste en el borde de un profundo abismo...
mi abrigo fue de lágrimas
mis ojos cruel fontana
más hoy resbalas sin remedio 
por el despeñadero de mi almohada.

¡Sobre el rocío de la aurora vas dormido  
hacia el vasto horizonte del olvido!

SOY ESTRELLA FUGAZ

Me construyo de ensueños
esperando por tí
deseando tus labios
y caricias de amor...
¡Me remonto de alas
y vuelo en libertad!
En la ausencia de luz
soy estrella fugaz.

Mas estoy condenada
a tu magistral 
nieve de verano
y calor invernal
condiciones variables
de un amor singular...
"¡Te siento, te espero
te tengo y te vas!".

miércoles, 19 de octubre de 2016

AÑORANZA

Porque para verte mejor
tengo que cerrar mis ojos 
y soñarte...,
te has ido tan lejos amor
que estoy enfermo 
de añorarte.
Si añorarte, pudiera más
al cerrar mis ojos moriría
para no abrirlos a la realidad...
"¡En la distancia
te pierdo vida mía!"



martes, 18 de octubre de 2016

VIDA DESIERTO

Allí estuve plantada 
en un valle
que más que valle 
era una vida desierto.
Árida, cuarteada, inhóspita y silenciosa.
Intentando restaurar mi piel, 
que reseca, estaba adherida 
a mis huesos. 
¡Entonces pude percibir
que ya hacía algún tiempo, 
había muerto!

Mis obstinadas raíces 
penetraron muy profundo 
coincidieron con mi esencia 
y se formó un nuevo mundo.  
¡Así hallé eternidades
al expropiar mi dolencia!
Un río de cristalinas aguas 
arrasaba con mis guerras
y reverdecieron mis ojos
en el vientre de la tierra. 



lunes, 3 de octubre de 2016

CARTA DE UNA MADRE

Me llena de aliento este amor...
«Amor de madre» 
por él, quien saltó con vida, 
en mi vientre. 
Es un amor que perdurará hasta 
el día de mi muerte
y con el transcurso de los años
se hace aun más fuerte.

Ví expander mi piel mientras crecías,
saludable, 
protegido en mis adentros
y al nacer tu lucha fue reñida
hasta que lograste aspirar 
tu primer aliento...

¡En ese momento, 
entendí que serías
un guerrero valiente, 
campeón de la vida!

¡Hijo mío!
Hermosa es la unión 
que entre tú y yo existe...
Fue el latir de mi corazón
lo primero que tu oíste.
Reposa de tus guerras 
y ven a mi regazo
olvida tu dolor, 
enfrenta tus fracasos.
Y deja que nuevamente 
te proteja... 
Al lado de mi corazón, 
entre mis brazos.