martes, 9 de junio de 2015

LA NIÑA AZUL

De niña aprendió a llorar callada. 
Frazada de lágrimas, lánguida mirada.
Cabellos de trigo y ojos de miel
sus labios rosados, pecas en la piel.
Se vestía simple, en colores sobrios. Calzón de mezclilla, blusón de algodón.
Una cadenita, un reloj de oro 
y unas zapatillas de cuero marrón..., 
                  
pero su cabello lo llevaba suelto           
libre como el viento
y claro como el sol...  
En el albergaba miles mariposas
lágrimas con alas 
y un ruiseñor 
que de vez en cuando
le cantaba nanas
para que durmiera un poco mejor.
De su mente libre, forjada en anhelos
pulsando vertiente  
había un mantial
que abría caminos y regaba sueños...
Sueños que crecían alas a volar
entre nubes blancas de inmensa belleza 
hacia el amplio cielo de su libertad. 
 
 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario