miércoles, 29 de abril de 2015

A MI HERMANO

Se derrama la neblina                                  
atravez de mi ventana                                          
convirtiéndose en llovizna  
Sobre el pesado cristal                                   
Y de mis párpados caídos 
También cae otra lluvia
Que pasea silenciosa 
De mis ojos hacia el mar.
 Esperando la mañana                          que no llega, está ocupada.
Esta noche se hace eterna                         
No acaba de terminar                                                                                                                                                                 ¡Angustia que se aclimata
crece y echa raíces!...
E inunda mis sentimientos.
Con mil lamentos escribo.
Mis abrazos están caídos
mi esperanza, corroída...
Soy gaviota que volando
sobre el mar, se ve perdida.

Recuerdo que cuando niños
desafiábamos la lluvia
las cuestas, el sube y baja
y el sendero hacia el barranco.
Te vi lanzarte de lo alto
del puente hacia la charca...
Eras casi invencible
inteligente, incorregible
peleón con un "hook" de izquierda
que a muchos dejó "atontaos" 
labioso en palabrería 
si estabas "enamorao". 

Recuerdos de mi memoria
que mi mente nunca olvida
para mi fuiste el amigo  
que me regaló el destino.
 
Eramos niños entonces
llenos de puro entusiasmo
¿Qué sabíamos del futuro?
¿Qué sabíamos del quebranto?
Torcida suerte la tuya
te sorprendió con abrojos
ahora te encuentras lejos
de mis manos y mis ojos.
 
Vacío tengo mis brazos
caído mi aliento y hombros
mi corazón confundido
no acepta que tú, tan fuerte
te hayas visto sumido.

¡Que el cancer te haya vencido
y tu muerte fue la salida!

Hacia los cielos hoy grito
con voz que al clamar implora
«¡Mi querido hermano Wilfre
hermano de ayer y de ahora!»